Repudio por la ola de muerte a estudiantes y juventud en Honduras. |
Escuadrón de la muerte asesina a cuatro estudiantes en Honduras
Esto es una repetición del Plan Colombia y los “Falsos Positivos”
“La
delincuencia nos arrebata la vida todos los días, pero Ustedes, en lugar de
combatirla, matan a estudiantes”.
Dirigente
estudiantil en la manifestación en Tegucigalpa en su discurso dirigido al
presidente y las FF.AA.
Por Dick Emanuelsson
Video:
https://vimeo.com/123383696
Escuadrón de la muerte asesina a cuatro estudiantes en Honduras from Dick & Mirian Emanuelsson on Vimeo.
TEGUCIGALPA
2015-03-27 / Cuatro estudiantes activos en las protestas estudiantiles fueron
asesinados y casi una decena heridos de bala. Es el saldo sangriento desde el
12 de marzo en Honduras.
El 24 de marzo cuando fueron
asesinados los estudiantes Elvin Antonio López (19), de
Darwin Josué Martínez (21) y Diana Yareli Montoya, 21 (ésta última falleció el
viernes pasado por la gravedad de las heridas), del Instituto Jesús Aguilar
Paz. A medio día el 25 de marzo fue
raptada una niña de solo 13 años cuando salía de su colegio en Tegucigalpa.
“Exigimos pupitres y recibimos tiros”, dicen los estudiantes.
“¡No es posible que estamos sentados en el piso como perros!
Ni sillas tenemos. ¡Hombre, compren sillas, Viejo de la Gran Puta”!
Fueron las palabras de Soad
Nicole Ham Bustillo dirigidas directamente al ministro de educación, Marlon
Escoto durante una manifestación, filmada por Globo-TV y Canal 36. La niña de
solo 13 años estudiaba en el Instituto
Central Vicente Cáceres (ICVC), uno
de los mayores colegios públicos de Honduras. Era una de las dirigentas
destacadas en las manifestaciones contra la política de educación del gobierno
de Juan Orlando Hernández y su ministro Marlon Escoto.
“Falsos Positivos” hondureños
El 25 de marzo fue encontrada
asesinada en un costal en las cercanías del colegio. ¿Quién tiene tanto odio y miedo
de una niña de 13 años? ¿Qué peligro representa ella?
– Son organismos represores del
Estado que los ha ejecutado a los cuatro estudiantes, son escuadrones de la
muerte, decía el periodista y director de Globo Radio-TV, David Romero en su
programa “Interpretando la
Noticia” y agregó:
– Esto es una repetición del
Plan Colombia y los “Falsos Positivos”. En Colombia presenta a los asesinados opositores
civiles como “guerrilleros dados de baja”. Estos asesinatos también es una
repetición de los años 80 cuando operaba el “Batallón 3-16”, desapareciendo y
asesinando a la oposición política, agregó Romero. Él fue uno de los centenares
de víctimas sobrevivientes del Terrorismo de Estado cuando el hombre fuerte en
el país era el embajador estadounidense, John Dimitri Negroponte.
El Pueblo en la Calle
Estudiantes, indignados y
embargados por dolor y rabia convocaron a una manifestación relámpago en la
mañana el jueves pasado para repudiar la represión hacía el movimiento
estudiantil de secundaria. Éste protesta contra el nuevo horario que convierten
a los estudiantes en “blancos” para la delincuencia cuando salen tarde en la
jornada nocturna. En cuestión de seis horas se movilizaron más de mil
hondureños, respaldados por el Frente Nacional de Resistencia Popular y el
Partido Libertad y Refundación. Con el banner; “No a los Escuadrones de la Muerte”, la marcha llegó a
la casa presidencial en donde varios estudiantes tomaron la palabra y se
descargaron su furia y dolor contra un Estado que dicen viola a los derechos humanos
y del pueblo en todas sus formas.
Varios de los oradores se
taparon el rostro para evitar pasar la misma suerte como sus otros cuatro
compañeros, asesinados por el escuadrón de la muerte, que según David Romero
esta al servicio al gobierno del presidente Juan Orlando Hernández y su
ministro Marlon Escoto.
Soad Nicole Ham Bustillo, 13 años. |
La última despedida. |
Cuatro estudiantes desaparecidos
En los enfrentamientos del
jueves pasado en la Universidad Nacional
Autónoma de Honduras, fueron desaparecidos cuatro estudiantes del Instituto Héctor Pineda Ugarte (HPU), que, cuando se escribe esta nota, todavía están
desaparecidos. Varios estudiantes fueron violentamente golpeados por el Comando
Militar que fue enviado para la
Universidad.
En una conferencia
de prensa, realizada en Tegucigalpa y transmitida a través de Globo TV el
jueves pasado, dirigentes estudiantiles denunciaban:
– Son cuatro
compañeros del HPU que estaban ayer en la lucha cuando nos estaban reprimiendo
en la UNAH, se
suponía que estaban en la posta (policial) de Valle de Ángeles, se movilizaron
y la posta estaba cerrada. La luz del fondo estaba encendida, tocamos, tocamos
y nada que nos abrieron, no sabemos su paradero no han llegado a su casa a
dormir y viendo la situación en que estamos, son compañeros que han estado al
frente de la lucha, han dado su cara”, declaró uno de los denunciantes.
– Esta es una
educación excluyente y no incluyente, ahora los colegios parecen ratoneras, hay
compañeras que llegan sin comer, compañeros que reciben clases sentados en el
suelo. No es reprimiéndonos o asesinándonos que nos va a callar, dijeron los
jóvenes al titular de la
Secretaría de Educación, Marlon Escoto.
Un agente de la polícia es desenmascarado como infiltrado por la comisión de seguirdad del Frente Nacional de Resistencia Popular. |
Asesinan a 86 jóvenes-niños mensualmente
Las cifras de la
violencia en Honduras son alarmantes en general y contra la juventud y la niñez
en particular. Hay dos "Ayotzinapa" dos veces por mes, dice Guadalupe Ruela,
refiriéndose a las desapariciones
de 43 normalista en México el 26 de septiembre de 2014. Ruela es director de la Casa Alianza en Tegucigalpa, organismo que desde décadas trabaja
con niños de la calle o niños en riesgo, presenta cada mes las cifras sobre
niños y jóvenes ejecutados en la nación centroamericana con sus ocho (8.2)
millones de habitantes.
– Hace seis años
(antes el golpe de estado militar), la cifra era 43 niños asesinados por mes.
Esa cifra ahora esta en 86, es decir, se ha duplicado, dijo Ruela en una
entrevista realizada por Globo-TV al respecto a los asesinatos de los
estudiantes esta semana.
Unicef reacciona
Como una reacción a
los asesinatos a los estudiantes hondureños, el Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef) exige
ahora que el gobierno de Honduras investigue los asesinatos de los cuatro
estudiantes.
– Hemos pedido que
haya una investigación por parte del Ministerio Público y se cobren las
responsabilidades del caso, afirmó el representante de Unicef en Honduras,
Cristian Munduate.
Una modalidad de
los nuevos comandos militares que el gobierno ha introducido desde hace un año,
y ya son más de 7.000 unidades, es filmar para hacer perfiles de los opositores
activos en las manifestaciones, denuncian los organismos de derechos humanos.
Pero cuando los militares son filmados por los medios de comunicación, como el
jueves pasado en Catacamas, en el departamento de Olancho, cuando 1500
estudiantes se enfrentaron con el comando militar, diez periodistas y
camarógrafos fueron atacados por los militares que en un caso incluso encañonó
a un camarógrafo con el fusil.
Al frente a la Casa Presidencial,
uno de los líderes estudiantiles resumió la actual política del gobierno hondureño
con las siguientes palabras que las dirigió a las vallas de tres cordones de
militares y policias armados con fusiles y palos:
– La delincuencia
nos arrebata la vida todos los días, pero Ustedes, en lugar de combatirla,
matan a estudiantes.
Video
de la manifestación el 26 de marzo al frente a la Casa Presidencial: https://vimeo.com/123383696
Tomado
de C-Libre:
Policías amenazan con sus armas a 10 periodistas
Alerta 043-15
Honduras, 27 de marzo de 2015
Honduras, 27 de marzo de 2015
Comité por la Libre de Expresión
(C-Libre). Un grupo de 10 periodistas de la ciudad de Catacamas, Olancho, recibieron
agresiones físicas, intimidación armada y destrucción de sus equipos
periodísticos durante la cobertura de una jornada nacional de movilizaciones,
convocada por varios sectores estudiantiles para rechazar las políticas
gubernamentales que extienden la jornada educativa.
Los uniformados
José Santos Ramos Mejía y José David Zúniga Amador accionaron las palancas del
cerrojo de sus fusiles en medio de los 10 periodistas y de los manifestantes.
El hecho más grave
se registró contra el periodista Raúl Amador, de Canal 30, porque fue
intimidado por el policía Ramos Mejía que le quiso apuntar con su arma de
reglamento y lo amenazó con disparar si no dejaba de grabar la protesta de más
de 1,500 estudiantes del Instituto Técnico 18 de Noviembre, el principal
colegio de educación secundaria en la ciudad.
Antes de eso,
Ramos Mejía agredió al periodista Amador, de Canal 30, al arrebatarle su cámara
estrellándola contra el suelo, mientras intentaba grabar imágenes de la toma.
Durante la
cobertura de las movilizaciones iniciadas a las 8:00 de la mañana, la patrulla
número 20-15, de Policía Nacional Preventiva al mando del Inspector Zúniga
Amador, irrumpió abruptamente embistiendo con su vehículo a los alumnos del
Instituto Técnico 18 de Noviembre.
“Unos 1,500 muchachos
entre 13 y 15 años, luego de congregarse en una cancha deportiva en el interior
del Instituto, salieron a las calles. Estaban manifestándose pacíficamente y
esperaban movilizarse hacia el centro de la ciudad, cuando los efectivos
empezaron a amedrentar a la población estudiantil”, indicaron los periodistas
que cubrían la manifestación. En medio de la protesta se produjo el ataque a la
prensa.
Ante la arremetida
policial, el periodista Gustavo Gallardo, de “Informativo La Verdad”, que se transmite
por el local Canal 11 y José Luis Maradiaga Paz, corresponsal de canal 33 y
Radio Globo pidieron al policía Ramos Mejía que se calmara, sin embargo, este
lanzó un manotazo destruyendo una segunda cámara.
Policías sin preparación
Enseguida Ramos
Mejía intentó apuntarle con su pistola al periodista de Canal 11 pero,
“afortunadamente en medio del tumulto la pistola se cayó y fue recogida por un
estudiante que se la entregó en sus manos”, indicó Gallardo en declaraciones al
Comité por la Libre
Expresión (C-Libre).
Al ver la agresión
los estudiantes se enardecieron y se abalanzaron contra la patrulla, en la que
se trasladaban cuatro elementos policiales, quienes se vieron forzados a irse
de la escena, en medio de una lluvia de piedras.
A eso de las 10:00
de la mañana, los 10 comunicadores de radio y televisión afectados, acompañados
por el presidente de la Red
de Alertas y Protección a Periodistas (RAPCOS) en Olancho, Rolando Iscoa,
interpusieron la denuncia ante el Ministerio Público, donde responsabilizaron
“al gobierno, al ministro y a la Policía Nacional, por cualquier cosa que le pase
a alguno de los afectados”.
En reacción al
ataque, los pobladores de Catacamas se pronunciaron “en diferentes espacios
informativos donde se han abierto los teléfonos y han repudiado esta acción de la Policía, pues se trata del
primer incidente de este tipo en la ciudad”, agregó Iscoa.
El presidente de
RAPCOS también detalló que tras interponer la denuncia, el coordinador de
fiscales del Ministerio Público en Catacamas, aseguró que realizarían las
investigaciones pertinentes.
Al respecto, el
portavoz de la
Policía Nacional, subcomisionado Leonel Sauceda, indicó que
están en un proceso de investigación para precisar si los policías denunciados
fueron los que participaron en este hecho y se les someterá a una audiencia de
descargo. De encontrar que violentaron la ley, se les aplicarán las sanciones
correspondientes, indicó.
Los jefes
departamentales tienen instrucciones de respetar, servir, ayudar y ver como un
amigo al periodista, sostuvo el oficial.
Los Principios
Básicos sobre el Empleo de la
Fuerza y de Armas de Fuego por los Funcionarios indica que
los encargados de hacer cumplir la ley “no emplearán armas de fuego contra las
personas salvo en defensa propia o de otras personas, en caso de peligro
inminente de muerte o lesiones graves, o con el propósito de evitar la comisión
de un delito particularmente grave que entrañe una seria amenaza para la vida,
o con el objeto de detener a una persona que represente ese peligro y oponga
resistencia a su autoridad, o para impedir su fuga, y sólo en caso de que
resulten insuficientes medidas menos extremas para lograr dichos objetivos. En
cualquier caso, sólo se podrá hacer uso intencional de armas letales cuando sea
estrictamente inevitable para proteger una vida.