viernes, 7 de agosto de 2015

Radio-TV Globo y ¿diferencia del “derecho al autor” entre música y programas radiales?





Radio-TV Globo y la diferencia del “derecho al autor” entre música y programas radiales

Por “Chele, El Atrevido”

TEGUCIGALPA / 2015-08-07 / A raíz del juicio contra el director de Radio y TV-Globo, David Romero, ha surgido una interesante discusión sobre “el derecho al autor” [ver más en Wikipedia].


En una intervención caliente el 10 de julio, Romero negaba rotundamente pagar una factura por 2000 lempiras (menos de 100 dólares) por música transmitida durante un mes en Radio Globo que una empresa, cuyo representante además apareció en el programa para explicar el trasfondo sobre el tema, había enviado a la empresa de Globo. No pudo explicar mucho el representante porque el ambiente se tornó bastante hostil en el estudio y solo faltaba un “combo” al representante que fue tildado por unos adjetivos bastante duros.

Pasando unas semanas comenzó el juicio contra Romero por calumnia e injuria a la abogada Sonia Gálvez. Su defensor presentó las pruebas que son varios videocasetes grabados por otra empresa comercial de las ediciones del programa “Interpretando la Noticia”, que dirige David Romero.


Sonia Gálvez y David Romero.


Y es ahora interesante como se voltea la torta.

Romero sostiene que esa empresa, que vendió los videocasetes ha violado la ley sobre “el derecho al autor”. La empresa ha comercializado estas u otras grabaciones y la abogada Sonia Gálvez, o algún representante de ella, compró los programas donde supuestamente Romero la tilda de diferentes adjetivos o delitos.

Romero tiene toda la razón en acusar mencionada empresa por violar el derecho al autor. Es ilegal comercializar en la calle o en cualquier lugar un programa grabado, como el caso de Globo.

Pero los autores de las composiciones de canciones (discos, cd´s), libros, revistas etcétera también tienen a su lado los “derechos al autor”. Romero está equivocado si cree que Radio Globo puede tocar música 24 horas del día sin pagar por ella a las personas que han producido estos productos ardúamente.

Es el mismo principio que él mismo ahora exige por sus programas. No se lo puede explotar y usar sin pagar por ellos. Así de sencillo.

¡Compositores y autores suecos recibieron 3,7 mil millones lps!

El 10 de julio tomé el ejemplo de Suecia, que por obvias razones lo conozco bastante bien. Los autores y los compositores tuvieron ingresos el 2014 en más de 1,4 mil millones de coronas, equivalente 3,7 mil millones de lempiras (3700.000.000.000). Me llamó mi hijo un día, muy contento y me dijo alegremente; “Papá, me acaba de llegar la plata del ´Stim´ que son 16.000 coronas (aproximadamente 44 mil lempiras) y ahora puedo comprarme un Mac con programa de Estudio”.

Mi hijo es cantante de reggae que ha grabado varios cd, hace giras constantemente en México, Alemania, Rusia u otros países y canta bien el chaval. Su música se toca en los diferentes canales y emisoras suecas y por eso le llega a final del año una suma de plata que es el producto por su afiliación en STIM, en inglés; Performing Rights Society, una organización sin lucro que los músicos, escritores, compositores hondureños también deberían tener para proteger sus obras y sobre todo, reclamar compensación económica para poder seguir en su gremio y para conseguir comida para la casa y su familia.


El mundialmente conocido grupo rock sueco "EUROPE" hizo la canción "The Final Countdown", algo así traducido como "la cuenta atrás final". También gozaba o goza, igual como los más desconocidos grupos o compositores suecos los ingresos por sus obras cuando son utilizados públicamente.



“Solo el Pueblo Salva el Pueblo”, se dice muchas veces. ¡MENTIRA!

“Solo el Pueblo ORGANIZADO Salva el Pueblo”, debe ser. Y sobre todo los que producen cultura que otros aprovechan sin pagar ´un cinco´ deberían estar organizados.

Mejor dicho; La empresa Globo y todas las demás empresas hondureñas que utilizan la producción musical, cultural, libros, etcétera deben pagar por esto, pero no lo harán si los afectados no se organicen y exigen el verdadero valor por su trabajo. Debe haber una legislación que es clarísima en ese asunto.

No es nada personal o en contra Globo, sino un principio. Pero sabemos que cada cambio estructural se enfrenta casi siempre con fuertes reacciones. Como el caso del “derecho al autor”.

Buenas noches, este viernes cultural.

“Chele, El Atrevido”



Leer más:

Del 10  julio: La música y el cobro al autor
 
En Suecia se pagó a los autores suecos de música 1,4 mil millones de coronas, equivalente 3,7 mil millones de lempiras. El encargado de cobrar para sus 77.000 socios es la organización STIM, en inglés Performing Rights Society, como dice ella “una sociedad de gestión colectiva para los creadores de música y editores de música”.
 
“En su nombre, STIM administra y otorga licencias a los derechos de la música y el texto. A través de su red internacional, STIM también gestiona los derechos del repertorio mundial de música.
Stim es una organización sin fines de lucro, cooperativas y representa a más de 77.000 compositores, compositores, letristas y editores de todo el mundo. Stim fue formado en 1923 en Estocolmo”.
 
Y así es en todo el mundo.
 
Si los hondureños ahora reaccionan es nada más que lógica, el tema es nuevo y siempre provoca reacciones, sobre todo en un país sacudido por la corrupción.
 
Lo importante es que los autores y compositores tengan un control sobre la administración de los “cobradores”. En Suecia son los mismos 77.000 socios que son los “dueños” de la organización y así tiene un control interno y democrático.
 
La señora que llamó a la radio (Marcia Villeda) y que había organizado un concierto en Tegucigalpa, es de esa clase social que también se indigna por tener que pagar 1,5 % en impuesto para su empresa, un impuesto ridículo y los empresarios privados, como el disco rayado de siempre, chillan, lloran casi sangre y dicen que dos millones de hondureños serán desempleados.
 
¡No les paren bolas!
Dick E.